Comentario de Mateu Seguí Díaz (#MateuSeguí)
Hemos hablado de la semaglutida (SEMA) 2,4 mg, un análogo del receptor del péptido-1 similar al glucagón (arGLP1), inyectable una vez a la semana, al ser hasta el momento el fármaco contra la obesidad que tendría más evidencias en la reducción ponderal de pacientes con obesidad (≥30 kg/m² de índice de masa corporal -IMC-) o con sobrepeso (27 kg/m2 a < 30 kg/m2 ). Sin embargo de un tiempo a esta parte ha surgido un nuevo polipéptido inhibidor gástrico –GIP- con acción dual (arGLP1/GIP) la Tirzepatida (TZP), también inyectable semanal, del que hemos hablado en diversas ocasiones, y ya comercializado en Estados Unidos (EEUU), algunos países de Europa y Japón en la diabetes tipo 2 (DM2) y en EEUU y Reino Unido en obesidad con unos resultados al parecer superiores a la SEMA 2,4 mg.
Hemos visto como SEMA 2,4mg es capaz de alcanzar reducciones ponderales en pacientes con o sin DM2 de entre el 9,6 y el 14,9% (ensayos clínicos –ECA-del programa Semaglutide Treatment Effect in People with obesity –STEP- entre 68 -104 semanas), aunque en condiciones controladas mediante dieta y ejercicio. Dentro de este el STEP 3 con dieta hipocalórica (1200-1800 Kcal/día) alcanzó el -16,0% y del 5,7% en el grupo placebo. Sin embargo, al interrumpir el tratamiento con SEMA 2,4 mg (STEP1) el 60% de los pacientes recuperaron su peso anterior al tratamiento lo que obliga a un tratamiento continuado. Siendo ésta una situación conocida en otros fármacos para el tratamiento de la obesidad, sea el orlistat o la combinación del bupropion/naltrexona.
La TZP, por su parte, demostró reducciones de hasta un 20,9% de peso tras 72 semanas de tratamiento en pacientes con obesidad pero sin DM2, el SURMOUNT-1 (Study of Tirzepatide in participant with obesity or overweight -1) pero faltaba conocer su comportamiento más allá de la situación del ECA en cuestión. (Sigue leyendo...)