Comentario de Carlos Hernández Teixidó (@carlos_teixi)
Nunca hemos tenido tasas de obesidad y sobrepeso más altas en la sociedad occidental como en el siglo XXI. La prevalencia global de obesidad ronda ya el 18% en hombres y el 21% en mujeres y se ha convertido en un problema de salud individual y de salud pública. Con la llegada de los fármacos incretínicos (arGLP1, duales y triagonistas) y los porcentajes de pérdida de peso que conllevan parece que podamos estar asistiendo a un impasse en este aumento de prevalencia.
De manera aproximada, y dependiendo de la dosis, liraglutida (LIRA) consigue pérdidas en torno al 8%, semaglutida (SEMA) 15%, tirzepatida (TIRZE) consigue un 20% y retatrutide (triagonista del que hablamos hace unos meses en este blog) consigue un 24% de pérdida de peso. Sin embargo, los ensayos revelan que una vez que se detiene la administración de estos fármacos, la mayor parte del peso corporal perdido se recupera. El estudio que comentamos hoy en el Blog de Mateu, repasa formas de mantener esa pérdida de peso de forma prolongada. (Sigue leyendo…)