Mas sobre los iSGLT2, aGLP1, la tirzepatida y finerenona
Es conocido que la Diabetes tipo 2 (DM2) produce gran cantidad de complicaciones en su evolución, unas complicaciones en gran medida relacionadas con el tiempo de evolución de la enfermedad y sobre todo por el control glucémico, de ahí que los antidiabéticos no insulínicos (ADNI) hasta hace pocos años han fundamentado su acción en el control de este parámetro bioquímico; sin embargo, sabemos desde hace algunos años que existen ADNI que tiene acciones beneficiosas más allá del control metabólico. Fármacos capaces de actuar sobre la enfermedad renal crónica (ERC), sobre la enfermedad cardiovascular (ECV), sobre la insuficiencia cardiaca (IC) y sobre el accidente cerebro vascular (AVC). Fármacos como los análogos del receptor del péptido-1 similar al glucagón (aGLP1) o los Inhibidores del cotransportador de sodio-glucosa 2 (iSGLT2) sobre todo si existe una ECV o ERC previa, de los que hemos hablado infinidad de veces.
Sin embargo, hemos visto como han aparecido dos fármacos más, la finerenona, que no es un ADNI, es un antagonista mineralcorticoide y la tirzepatida (TZP), un nuevo fármaco con acciones de aGLP1 y del polipéptido inhibidor gástrico (GIP) (aGLP1/GIP) autorizado el año pasado en EEUU. Vimos como la finerenona es capaz de alcanzar beneficios renales y cardiovasculares (CV) en pacientes con DM2 y ERC y el TZP, por su parte es capaz de generar reducciones del peso corporal como nunca se habían alcanzado antes.
Destacamos con el metaanálisis de Nauck et al este año como todos los aGLP1 y la TZP frente a la insulina (INS) redujeron el peso de forma significativa frente a la INS 4,6 Kg (4,7 a 4,4) siendo en este aspecto destacable la TZP de hasta 12 Kg (13,8 a 10,1). Al tiempo que la hipoglucemia y la presión arterial (PA) fue sensiblemente menor en los aGLP1 y la TZP que la INS. Como contrapartida los aGLP1 y la TZP se asociaron a náuseas, vómitos y diarrea y a más interrupciones del tratamiento que la INS. Con todo, se apunto que estos deben evitarse en pacientes ancianos frágiles, en comorbilidades avanzadas, sarcopenia, enfermedad hepática, pancreatitis e ingresados o en estado catabólico.
En cuanto a los iSGLT2 vimos este año con D'Andrea et al y frente a un comparador como son los iDPP4 como éstos se asociaron con una reducción del riesgo de eventos CV mayores (MACE) con un hazard ratio (HR) de 0,85 (IC 95% 0,75-0,95); que en la prevención de la hospitalización por HC (HIC) llegó a un HR 0,46 (IC 95% 0,35 a 0,57) y en la reducción de la ERC en comparación con los iDPP4 ; aunque se demostró un aumento del riesgo de infecciones genitales y de cetoacidosis (CAD), aunque las fracturas, las caídas, las amputaciones y los casos de hipovolemia fueron similares en ambos grupos.
Un metaanálisis en red siguiendo las indicaciones de PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-analyses) en el desarrollo de metaanálisis de ensayos clínicos aleatorizados (ECA) en DM2 hasta 24 semanas de duración en bases de datos médicas Ovid Medline, Embase, y Cochrane Central hasta 14 Octubre del 2022 con el que analizar los beneficios y efectos adversos de estos fármacos.
Se evaluaron en 816 ECA o 471.038 paciente 13 tipos de fármacos y su comparación con tratamientos estandares.
Según esta los iSGLT2 (odds ratio –OR- 0,88, IC 95% 0,83 a 0,94) y los aGLP1 OR 0,88 (IC 95% 0.82 a 0,93) reducen la mortalidad por cualquier causa (MCC). La finerenona en pacientes con ERC también OR 0,89 (IC 95% 0,79 a 1,00) aunque no otros inhibidores mineralcorticoides. Que los iSGLT2 como los aGLP1 reducen la mortalidad CV (MCV), el IAM, la HIC y la ERC terminal. Solo los aGLP1 reducen el AVC y los iSGLT2 son superiores en reducir la ERC. La TZP es el fármaco que reduce con mayor intensidad el peso corporal (8,57 kg de media).
Mas datos sobre moléculas ya conocidas que confirma sus beneficios CV y renales con especial mención a la TZP y la finerenona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario