El cribado de la diabetes gestacional según la U.S. Preventive Services Task Force
Se trata de una actualización de la U.S. Preventive Services Task Force (USPSTF) de las recomendaciones hechas en el 2008 sobre el cribado de la diabetes gestacional (DG). En ésta se hace hincapié en los beneficios y los inconvenientes de aplicar la misma después de las 24 semanas de gestación y de tratar a la madre y el niño que presenten dicha condición. Esta revisión no tiene en cuenta los criterios de eficiencia, no valorando el coste de la implementación de dichas medidas.
Está dirigido a mujeres gestantes sin diagnóstico previo de diabetes (DM), tanto sea tipo 1 (DM1) como tipo 2 (DM2). La DG se define, por tanto, como un estado de intolerancia hidrocarbonatada que aparece durante la gestación. Su prevalencia varía según la definición adoptada y el grupo étnico, pero en EEUU se encuentra entre el 1-25%, leemos.
La importancia de esta entidad (que no patología, en sensu stricto) es que incrementa el riesgo de complicaciones gestacionales y obstétricas a la madre (preeclamsia, distocias de hombros…) y alteraciones físicas al recién nacido (macrosomia, traumatismos al nacer, hipoglucemia neonatal…). Al margen de esto es un estado de insulino-resistencia que aumenta el riesgo de desarrollar DM2 entre un 15-60% a los 5-15 años del parto.
Según esta revisión la USPSTF recomienda el cribado de la DG en gestantes asintomáticas después de las 24 semanas de gestación (recomendación B). En este aspecto, la prueba más comúnmente utilizada en EEUU es la prueba de tolerancia oral a la glucosa (SOG) con 50 gr de glucosa. Aunque existen otros métodos de cribado como la glucosa basal o el cribado en base a los factores de riesgo las evidencias no son concluyentes.
La USPDTF encontró evidencias de que el tratamiento de la DG mediante modificaciones dietéticas, control glucémico, e insulina (si se precisa) reducen moderadamente el riesgo de preeclamsia, macrosomía y distocia de hombros. En cuanto a las diferencias entre las incidencias de “pequeños para su edad gestacional” o episodios de hipoglucemia no son estadísticamente significativas.
Pero, señala que la evidencia actual es insuficiente para evaluar el equilibrio entre los inconvenientes y beneficios del cribado de la DG en gestantes asintomáticas antes de las 24 semanas de gestación (declaración I).
Existen ensayos clínicos que la puesta en marcha de este cribado incrementa el número de visitas prenatales en aquellas DG tratadas frente a aquellas no tratadas, a la vez que no hubieron diferencia entre las tasas de cesáreas y las admisiones en las unidades de cuidados intensivos neonatales.
Así, la USPSTF concluye, que existe una evidencia moderada en los beneficios de cribado gestacional de la DG después de las 24 semanas en la reducción de las complicaciones del tipo preeclampsia, macrosomía y distocia de hombros. Pero, antes de las 24 semanas no existen suficientes evidencias que lo avalen.
Un documento muy interesante que hay que tener en cuenta para hacerlos una idea clara de este siempre discutible tema. Se puede acceder libremente
U.S. Preventive Services Task Force Screening for Gestational Diabetes Mellitus: U.S. Preventive Services Task Force Recommendation Statement. Ann Intern Med. 2014 Jan 14. doi: 10.7326/P14-9011. [Epub ahead of print]
Muchas gracias por compartir la información. Debemos estar informadas de todos estos asuntos y toda fuente que compartamos es esencial para ayudarnos entre todas.
ResponderEliminarQue paséis un buen día y gracias :)
Estefania.