Páginas

2 de diciembre de 2011

La olvidada y poco diagnosticada “Maturity Onset Diabetes of the Young (MODY)”

La olvidada y poco diagnosticada “Maturity Onset Diabetes of the Young (MODY)”

Quien escribe este post, en una época que en este país aún los médicos de cabecera eran de familia (sin fronteras etarias), atendió a un niño, que desde el primer mes de vida fue diagnosticado de diabetes tipo 1 y tratado con insulina. A partir de aquí tuvo toda una infancia, adolescencia... sometida a la tiranía de los pinchazos, hasta que a la edad de 22 años, al tener una hija con el mismo problema, su diagnóstico fue revisado, y pasó a tratarse como su hija, con sulfonilureas. Ambos fueron diagnosticados de una mutación enmarcada en el concepto de Maturity Onset Diabetes of the Young (MODY), desde entonces este capítulo de la diabetología me interesa y preocupa. Un capítulo amplio y heterogéneo de trastornos monogénicos de las células β que se supone afecta al 1-2% de los diabéticos pero que no se sabe a ciencia cierta pues faltan estudios epidemiológicos de gran calado. La importancia del diagnóstico, como nuestro caso, se basa en el tipo de tratamiento que precisan y en el consejo genético, pues con familiares del primer grado existe un 50% de probabilidad de presentar la misma mutación, lo que confiere un riesgo superior al 95% de desarrollar diabetes. Por otro lado, la clínica es indistinguible de la diabetes tipo 1 o tipo 2 pero debe sospecharse ante cualquier DM diagnosticada entre los 10-45 años. La diabetes neonatal, que ha sido el caso que ha dado pie al post, es una forma rara, que no se trata en el documento que comentamos.
La diabetes tipo MODY se conoce desde los años 1970 como una forma familiar de diabetes no insulinodependiente que se da en pacientes menores de 25 años y que tiene una base genética. Esta base genética ha dado pie al diagnóstico genético desde 1990. Se tratan de mutaciones de los genes de las enzimas glucokinasa (GCK) y de factores de transcripción nuclear del hepatocito
factor 1α (HNF1A) y del factor 4α (HNF4A). Suponiendo estos tres el 32, 52 y 10% de todos los casos detectados en United Kingdom -UK- respectivamente. Con todo, hasta la mutación de 10 genes pueden estar implicados en el fenotipo de MODY, según leemos
La idea que nos debe quedar es que son diabéticos con una fuerte carga familiar, que su comienzo es precoz y generalmente antes de los 50 años, que es independiente de la insulina (aunque pueden llegar a necesitarla) y que no tienen relación con la insulinoresistencia ni con la autoinmunidad contra las células βpancreáticas. Y sobre todo que es un diagnóstico que suele pasar desapercibido siendo diagnosticados incorrectamente de DM1 o DM2 hasta en un 80% en UK, llegando a retrasos en el diagnóstico que de media en este país llegan a los 13 años. Adjuntamos dos artículos al respecto.

Gaya Thanabalasingham, Katharine R Owen Diagnosis and management of maturity onset diabetes of the young (MODY). BMJ 2011;343:d6044 doi: 10.1136/bmj.d6044


Fajans SS, Bell GI..MODY: history, genetics, pathophysiology, and clinical decision making. Diabetes Care. 2011 Aug;34(8):1878-84.

No hay comentarios:

Publicar un comentario